martes, 1 de febrero de 2011 | By: Famara González Díaz

Estuve a tu lado y lo sufrí contigo. Te lo dedico...


[Este relato está escrito en primera persona, pero yo no soy la protagonista. En su momento, puse las palabras que expresaban los sentimientos de la verdadera protagonista. Una gran amiga que tuvo su primera caída en el amor y yo le ofrecí mi hombro.]


Tengo grabado cada beso y cada caricia en la memoria de mi piel, al igual que su aroma. Llevo impresas sus palabras y sus promesas en el libro de mis recuerdos. Traía consigo una enorme decepción y miedo del concepto amar cuando lo conocí. Le brindé todo mi apoyo, cariño, ilusión... Me enseñó el lado más tierno del amor, llenándome de fantasías que creía solo reales en los cuentos de hadas. Poco a poco fuimos creando una bonita historia de dos, él con todas las heridas curadas y yo con una venda en los ojos que no me dejaba ver mas allá de su sonrisa.


De vez en cuando me paro a pensar cómo sucedió. Cambiaron las cosas, cambió él y los colores en mi entorno desaparecieron. Me echaba la culpa de todo, hasta que comprendí que en el brillo de sus ojos no era mi nombre el que se leía. Ese día el mundo dejó de girar y me dejó tan vacía, que todavía siento como si una garra me oprimiese el corazón.

4 comentarios:

Unknown dijo...

Famara, perdona por aparecer en tu rincón, me ha gustado mucho el relato, sigue, pero ten presente que te queda mucho camino, muchos paisajes que conocer y que el amor no es esa primera decepción, o las primeras, el amor es algo mucho más profundo y que espero que algún día este junto a ti.

Un afectuoso saludo,

Famara González Díaz dijo...

Muchísimas gracias por tu opinión Saudades y los ánimos. Esta entrada no está muy bien explicada ya que está escrita en primera persona, pero yo no soy la protagonista.
Yo solo expreso con palabras los sentimientos de una amiga.
Un abrazo,
Famara.

Unknown dijo...

Famara veo que eres de una preciosa tierra, sigue escribiendo, es una manera de ampliar horizontes y de dar salida a tu sensibilidad, que veo que tienes mucha.

No te asustes por las pequeñas locuras que escribo, es una manera de sacar una sonrisa en los lectores, aunque a veces resbale una lágrima por el alma.

Gracias,

Anónimo dijo...

Como olvidarte, una vez mas, sin palabras... Te Quiero AMIGA.

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